top of page
Still Life Photography_edited.jpg

Antropología de la alimentación

La alimentación ha sido vista siempre con una visión muy pragmática, tratada como una cuestión de salud, dietética y nutrición. A pesar de esto, como historiadores, nuestra labor es incorporar al discurso y análisis del pasado, algo tan universal como lo es el comer y el beber. ​

Todas las sociedades se conforman por una serie de tradiciones y conjunto de procesos sociales e históricos que desembocan en la definición de una identidad común. Según dice Alicia Guidonet en su obra La antropología de la alimentación, "Comer no es natural. Si comemos lo que comemos, lo hacemos por unas razones en las que intervienen factores sociales, culturales e históricos". Es decir, lo que comemos y no comemos nos determina de igual forma que lo puede hacer los valores que defendemos.  Cuando hablamos de la Antropología de la alimentación, quizá lo primero que nos venga a la mente son las magníficas obras del investigador Marvin Harris, Bueno para comer: enigmas de alimentación y cultura y Vacas, cerdos, guerras y brujas. Los enigmas de la cultura. Pero ¿qué trabaja este campo? Los intereses de esta rama de la antropología, es poner encima de la mesa cuestiones que, hasta entonces, se han planteado desde una visión naturalizada.  Es cierto que existen una serie de predisposiciones genéticas en los grupos étnicos, que nos hacen más tolerantes o no con algunos alimentos como la intolerancia a la lactosa a poblaciones asiáticas.  Por otro lado, encontramos cuestiones como el clima, terreno o abundancia de un alimento en un espacio concreto, que van a determinar la elección de este como un elemento principal en la dieta de la cultura que lo adopte. A pesar de esto y como explica Harris, son aspectos que, aunque necesarios al tener en cuenta el análisis, no son el eje central de la identidad que se va formando. La antropología de la alimentación va a buscar cuál es la ideología del comer, cuál es el proceso histórico y cultural al que se han sometido los víveres para configurar una sociedad. ​Para ello analiza aspectos como el simbolismo de los alimentos, si estos pueden tener un significado en relación a creencias como la fertilidad, alimentos que son sagrados o que puedan ser tabú. Otro aspecto que aborda son los propios procesos de preparación, almacenamiento o consumo y cuál es el significado por el que se hace de una forma u otra. Estos temas convergen para llegar al fin último, de entender la dieta y alimentación de una cultura como el resultado de una serie de decisiones condicionadas por sus estructuras ideológicas, que no son estáticas, sino que se adecúan al contexto constantemente en contradicción, cambio y evolución.

Bibliografía

  • Harris, Marvin. 2022. Bueno para comer. Alianza Editorial.

  • Guidonet Riera, Alicia. 2007. La antropología de la alimentación. Editorial UOC.

bottom of page